Para ser eficaces en el servicio a Dios y establecer el Reino (en la tierra) se necesitan tres cosas:
- Caminar con Dios en una relación personal y no anteponer nada delante de Dios en nuestros corazones (él siempre debe tener el primer lugar).
- Conocer las esferas de autoridad del Reino de Dios y caminar de acuerdo a ellas.
- Caminar en el dominio que Dios nos ha dado en su reino (Romanos 12:3). Cada quien debe ejercer su función asignada con responsabilidad, con y debajo de autoridad.